21 de febrero de 2007

Zapatos




Varias zapaterías han quebrado,
porque la gente a comprender empieza.
Que ahora nadie necesita de calzado,
porque todos andamos de cabeza.



Se escuchó por ahí en Regiolandia

20 de febrero de 2007

Generación 93-96

El 14 de febrero recibí un mensaje electrónico que tenía por título: La prepa a 10 años después. Hice click en el mouse y ahí estaba la invitación para la reunión de bachillerato, generación 93-96. Se me puso la piel de gallina, sentí que 10 años de mi vida me habían pasado por encima (sólo con dar un click). Marzo 9 es la fecha prometida para hacer un recuento en persona, para ver en qué vamos, para resumir una década entre coca-cola y papas fritas. No podré estar con ellos para ver fotos, reír y platicar largo y tendido, pero en este espacio, mientras me bebo mi coca-cola y brindo por la generación, les cuento estos diez años. Si alguno de ustedes lee esto, quiero que sepa que la prepa fue una época fregona, que la pasé muy bien y que lo que aprendí con ustedes, con mis amigos, me ha servido mucho y sé que me seguirá sirviendo…. Así que ¡viva la prepa! ¡SALUD!

Como muchos de mis compañeros, salí de Zacatecas en agosto del 96 a estudiar una carrera. Me fui a Monterrey decidida a hacer letras españolas, licenciatura por la que nadie daba un peso (Bueno, qué quieren, mejor eso que estudiar arte dramático, que era mi gran ilusión…jajaja). Estuve tres años en Monterrey y después me fui a Barcelona con mis dos amigas Nadia y Cecy, a las que, a propósito, veré precisamente el 9 de marzo en una conferencia y haremos una pequeña reunión de generación de letras españolas (sí, tuve una micro-generación de carrera).

Regresamos después de un año con el pelo súper corto, con “ideas revolucionarias” y, eso sí, añorando comernos unos tacos con salsa de la esquina (que nos hicieron una congestión tremenda una vez que estábamos en el puesto y nos atascamos). Al semestre me gradué, en diciembre de 2000, de Lic. en Letras Españolas y me quedé trabajando en el Tec un año y medio, mientras preparaba papeles para irme a hacer una maestría a Canadá.

Para el 2002 ya estaba volando hacia Calgary, donde hice una maestría en Literatura Latinoamericana y me la pasé como en la prepa –como un enano que se divierte sin parar-. Conocí a mucha gente en Canadá y tengo muy buenos recuerdos de esos dos años. Ahí también conocí a mi compañero de ruta: Adrián, un argentino buena onda y de un metro noventa que me gustó desde que lo vi (!sí, venga la miel chorreando y toquen los violines!). Empezamos a salir en noviembre de 2003, en el 2004 nos mudamos a vivir a Houston y nos casamos en diciembre de 2005. Adrián ha estado conmigo en todo momento y su compañía y amor fueron decisivos en el 2004, cuando mi madre murió de cáncer. Me ha tomado un tiempo recuperarme de esa pérdida, pero cada día que pasa es mejor que el anterior y, sin duda, mi matrimonio me ha dado alegrías y nuevas expectativas. ¡Ah! ¡Se me olvidaba! Tenemos dos hijas, Rafaela y Donatela, un par de tortugas que son mi adoración y van a cumplir un año este marzo.

También en el 2004 comencé a hacer un doctorado en letras hispanas (pan con lo mismo). Ha sido muy difícil, cansado, absorbente y más de una vez he pensado en dejarlo. Sin embargo, ya me queda poco, ahora estoy haciendo mi tesis y también he tenido mis satisfacciones. He ido a muchas conferencias y ya empecé a publicar algunas cosillas por ahí, pero lo que más me gusta es publicar en el blog porque puedo hablar de lo que quiera…Nótese. Igual trabajo como editora y traductora; me encanta ese trabajo, me permite jugar mucho con las palabras y seguir en lo mío. Tampoco paro de leer, todo lo que me ponen en las manos lo leo, e incluso me pagan por ello. Nada mal.

Y bueno, “algunas cosas salen bien, otras salen mal” pero puedo decir que estos diez años me han tratado excelentemente y espero que a ustedes también, generación 93-96 del Tec Zacatecas.

Un beso grande,
A.

P.d. Les debo las fotos.
P.d.2: Gente, les debo Ushuaia 2, 3 y 4, pero ya están en camino.

13 de febrero de 2007

Home


En un viaje a San Antonio, Texas me topé con un mariachi que bajo sombreros y trompetas interpretaba "Your too good to be true" de Frank Sinatra. Debo aceptar que me gustó y todo el público anglosajón chocaba con fuerza las palmas de sus manos, hasta unos "atrevidos" osaron zapatear la interpretación mexico-americana más sorprendente que había visto.
¿Quién no conoce al buen Sinatra? Es melcocha pura, un derroche de amor, desamor, suspiros, chocolates, viajes a la luna, pegostes debajo de la piel. Mañana, sin duda el 14 de febrero, millones de personas cantarán a boca de jarro "I´ve got you under my skin", y con suerte se interpretará alguna versión lambada.
Hoy Michael Buble, se dedica a revivir al buen Sinatra, recanta sus canciones en distintas versiones y debido a que no tiene competencia, los fans voltean a escucharlo, dotado de impactante voz y canciones que no necesitan mucha mercadotecnia para pegarse en el oído.

Entre todo el repertorio Sinatresco de Buble, solo hay una canción de su autoría: Home. Supongo que fue el resultado de sus meditaciones después de sumergirse en letras destinadas al escrutinio de la filosofía del amor. En la canción, el amor se reduce a una casa, en la que siempre piensa, la que siempre busca y a la que siempre quiere ir.

Creo que si pudiera elegir ser alguna parte de una casa, escogería ser un sofá en donde poder desparramar mis sentimientos después de un agotado día.

...un feliz día de san Valentín en una casa y buen sofá.

6 de febrero de 2007

Entre casa y pareja...

Encontrar la casa es como encontrar pareja, la pareja.

Así es, para comprar una casa hay que llevar a cabo tantos pasos como para llegar a ese "significant other" que todos buscamos alguna vez. Les cuento esto de primera mano, ya que esta semana casi me hago de una casa, pero.... en fin, va que va.

Todo empieza cuando visitas los barrios de la ciudad; es como ir a los bares. Vas a uno, a otro y a otro por varios fines de semana. Coqueteas con las casas y ellas contigo, te hacen guiños con las ventanas, te ponen flores en la entrada y abren las puertas cuando pasas. Algunas, más atrevidas, te dejan un discreto papelito en el jardín de enfrente, te dan su teléfono, te dicen cuáles son sus cualidades, te engatuzan. Regresas cansado de la juerga y en el fondo piensas que deberías llamarle a alguna de ellas. Tal vez para que salga contigo a un café o simplemente para que te cuente más de ella; pero no lo haces porque no te convence del todo o porque el precio que hay que pagar es muy alto. Así que sigues yendo a los bares, semana tras semana, vuelta tras vuelta, cerveza tras cerveza. Hasta que un día, en medio de un bar, la encuentras inesperedamante. Ahí está la casa de tus sueños. No lo piensas más, decides que a ésta sí vas a llamarle, que no importa nada, que la quieres conocer ya. Llamas y te contesta el agente de bienes raíces, quien te promete te llevará a verla ya mismo. Vas, ves su escultural figura !es hermosa! El agente abre la puerta, entras, no lo puedes creer, lo sabes !ésta es! Dices que sí, que la quieres, que la amas, que la adoras y que no puedes vivir sin ella...decides comprometerte. Le das el anillo cuando firmas el pre-contrato. Los preparativos de la boda comienzan a marchar. De ahí llevas a los inspectores para que la examinen, es como conocer a los padres políticos. La observan de pé a pá y te dicen todos los "detallitos" que tiene. Que si los cimientos están flojos, que si hay que darle un tratamiento anti-termitas, que si las ventanas no tienen protecciones, que si tiene humedad en la pared. Te lo dicen todo de tajo y te quedas frío, pero nada importa, no señor, ésta me gusta. -Todo va a salir bien, no te preocupes, querida mía-. Y ahí estás, haciendo números, cortando a algunos de los invitados al banquete, pidiendo un pastel más barato, preparando el presupuesto de las flores, todo en diez días, antes de que se te acabe el pre-contrato. Llega el día de la boda, no lo puedes creer, por fin será tuya. Tanto te habías imaginado a "Pomponio" -tu gato- retozando alrededor de ella que, ahora que lo ves como una realidad, casi se te cae la lágrima de la emoción. Estás ahí, esperando con el bolígrafo en la mano, listo para firmar las escrituras cuando, de la nada, te dice el agente de bienes raíces: -Hay un problema. Los actuales dueños no están dispuestos a negociar los arreglos de la casa. Lo máximo que te dan es una cantidad ridícula de dinero para que soluciones algunas cosas, pero no van a hacer nada más-. -!Qué qué! -contestas indignado- !Pero si esto no es una dote! !Es lo mínimo necesario para meterme a ésa casa!-. -Lo siento, no puedo hacer nada más- contesta el agente con la cara más larga que has visto en tu vida. -Padre, no me diga esto, la novia tiene que llegar. No me puede dejar vestido y alborotado en el altar... !No ahora!-. -Lo siento mucho, hijo, hay que tener fe. Por algo son las cosas. Ya encontrarás otra mejor-. Se te cae el mundo encima, te han dejado plantado, justo el día en que ibas a dar el sí.
Después de un tiempo te repones, pero te preguntas más de una vez qué hiciste mal. Jamás obtienes la respuesta.

Y bueno, vuelves a los bares, a hacer citas a ciegas, a coquetearle a la de al lado. Vuelves a la búsqueda intensa, desgastante y azarosa... la de la casa de tus sueños.

A.

5 de febrero de 2007

Buenas nachas...

Diciembre me trató muy bien, fueron vacaciones para "mostrar México", y no parecía labor fuera de mis alcances. Visualizando la experiencia no encontraba la razón por la cual mis visitas identificaran diferencias sustanciales entre Canadá y Cd. Valles. ¿Tengo acaso el corazón un poco iluso? Creo que podrán coincidir conmigo que si. En realidad para evitar el choque cultural sólo tenía que:

  • Dar santa sepultura a todos los perros muertos en la carretera, así como entrenar, educar y peinar al resto.
  • Extraer el chile de la comida y de paso también de los dulces.
  • Quitar la basura de las calles (y atemorizar como perro rabioso a las personas que la tiran).
  • Lanzarme con brocha en mano a señalizar humanamente todas las calles, carreteras y veredas.
  • Desterrar la tortilla de México (al fin ya esta re-cara).
  • Para rematar solo en "decoración" conseguir una 300 toneladas de nieve para entonar el sentimiento decembrino.

Al final, la misión parecía mexicanamente imposible, y aterrizaron Tina & Garry con almas Danesas y Canadienses, respectivamente, para descifrar el enigma de la tortilla y el tequila. Diciembre por supuesto, navidad blanca en Cd. Valles, donde solo tuvimos 25 grados y los vallenses se arroparon mientras mis amigos se untaron cual fantasmas bloqueador de máxima potencia.

El resultado, fue una danesa diciendo "fíjate mamón" y adicta a los tamarindos con chile, por otro lado un canadiense internado en las enchiladas y el tequila. Todo lo anterior a tono de cascadas, zacahuil, toneladas de tacos y piñatas.

Al final del viaje, Garry, quien intento bajo todos los medios aprender español, me dijo orgulloso y con notable esfuerzo "Ceci, Buenas Nachas". Al observar la paralizada sonrisa de mi Padre, nuestro representante Canadiense quiso comprobar "it means good nigth...right?". En ese momento suspiré satisfecha, había logrado convertir un canadiense en un alburero nato en tan solo 10 días, y a nadie le sobra un elogio al trasero saturado de calorías por navidad.

Las fotos se las debo...este blog nos esta comploteando por el momento....pero, venceremos.

Denuncia

El sábado a las 5:36 pm estaba a punto de "postear" la segunda parte de "Ushuaia...", pero justo el sistema blogístico se cayó y perdió TODA la información, la cual fue irrecuperable.
!"#$%&/()!"#$%&/()!"#$%&/()!"#$%&/????!!!!!!
Hace años que no veía uno de mis textos perderse en el ciber-espacio así, tan descaradamente. El centro de ayuda para el bloggero desesperado no me ayudó para nada, y ahí quedé yo, lista para la terapia psicológica. Por ahí debe andar "Ushuaia 2", dando vueltas en un hoyo negro de la red.
Gracias, blogger helpers, gracias.

A.

1 de febrero de 2007

Nota al pie

Si quieren ver de dónde sale el pre-texto de este texto vayan a: http://blogs.elboomeran.com/figueras/2007/01/mujeres.html

Marcelo Figueras no pudo haber escrito algo más....errrrrr.... bueno, ya me dirán.
A.

"Ahora si que te has metido en problemas, chico (y notarás que te llamo Chico, y no Harpo, y mucho menos Groucho).
Ya desde el comienzo me insultas, insinuando que tu ayer es mi antes de ayer. Pues déjame decirte, que esto que estás leyendo yo lo escribiré mañana.
Y luego te atreves a debatir lo "indebatible". La respuesta a tu pregunta es pura estadística: hay menos mujeres escritoras que te vuelen la cabeza (no regales esas ideas, Marcelo), simplemente porque hay menos mujeres escritoras… y la respuesta a la pregunta que no formulaste es: hay menos mujeres escritoras porque estamos ocupadas colgando la campera que siempre olvidás en la silla y que nunca pones en el gancho.
Así que mejor, renuncia a tus esperanzas, esa Joyce no está llegando, está lavando el calzón de Ulises, esa Proust está en busca del nieto perdido, esa Shakespeare está en el mercado de Venecia y esa Cervantes está sacando las manchas de la ropa de su ingenioso caballero".

Respuesta de Valeria a Figueras (y mi énfasis cursivo).