24 de enero de 2008

Año nuevo a 4 manos

Los caminos de la vida

Como ya Cecy lo dijo en el post anterior, sobrevivimos a la llegada del 2008.

Y es que el Adriancito y yo nos fuimos a visitar a Cecy a las merititas tierras huastecas, donde el zacahuil, el agua a cántaros y la aventura son elementos imprescindibles para decir que se pasó dignamente por aquella zona.

Teníamos planeado el viaje desde marzo o abril del 2007. Adrián dijo que quería aventuras huastecas y yo dije, me parece perfecto. Así que le hablamos a Cecy y le preguntamos que qué le parecía a ella y a la familia que les cayéramos en año nuevo. La respuesta fue un sí. Pasaron los meses y de pronto ahí estábamos, diciembre 28, peregrinando hacia la Huasteca Potosina.


Peregrinando en el semidesierto

Salimos de Zacatecas temprano para llegar en la tarde a Ciudad Valles. Al principio, el camino era plano, recto y sin chiste, pero un par de horas antes de llegar a Valles la cosa se puso feroz. Pura curva en una carretera a dos carriles, arriba y abajo, más arriba, más abajo. Adrián se emocionó porque "había llegado lo bueno"; basta y sobra decir que yo me agarré hasta con las uñas y no dejé de decirle a Adrián: Baja la velocidad, baja la velocidad... !bájale te digo! (Los placeres de viajar en pareja...). Después de las dos emocionantes horas vimos por fin la ciudad... síiiiiiii... por fin un valle. Llegamos a la casa de Cecy y platicamos un buen rato con su hermano y sus papás, quienes por cierto, nos trataron como reyes. Después de descansar un rato, Cecy nos dijo que para empezar el tour con todas las de la ley, íbamos a ver los precios e itinerarios de los tours de los rápidos del río Tampaón. !Súper bien! !Vamos a los rápidos! No había nada definido, más que nada porque los horarios estaban limitados, pero... cuando vimos que al otro día salía un grupo y que había lugar, Adrián dijo: sí, nos lanzamos. El hermano de Cecy, Carlos, apoyó la moción, y Cecy y yo, si teníamos miedo, pues ahí nos salió "lo macho"y firmamos el contrato. Ahí estábamos, los cuatro fantásticos, listos para la acción y el desafío de las aguas. Pero claro, primero hay que alimentarnos para que la aventura no caiga tan pesada, y esa noche nos sampamos unos ricos antojitos huastecos, incluidas unas enchiladas con cecina deliciosas, unas gorditas y unos tacos.


Las curvas peligrosas

Al otro día nos levantamos, desayunamos unos chilaquiles con jugo de naranja, mandarina y toronja recién hecho (no es por nada, pero la mamá de Cecy cocina de-li-cio-so) y salimos a la aventura. El punto de reunión fue el hotel Aventura Huasteca. Ahí conocimos al "Patas", nuestro guía principal, y a nuestros compañeros de aventura: una familia de alemanes y una familia de San Luis Potosí. Cuando vi al padre alemán, un tipo grande y gordo, me dije: !uf! si este va, me canso de que voy también. Así que, para no hacerla más larga, nos subimos a la Van que nos llevaría a nuestro destino en el río Tampaón. Aquí hay que decir que, en caso de que no hayan visitado la zona, la Huasteca es todavía muy virgen, lo cual es excelente porque se está en la naturaleza a pleno, pero claro, no esperen los caminos asfaltados, ni los baños al lado de la ruta porque no los van a encontrar. La Van anduvo por caminos de terracería por aproximadamente un par de horas, durante las cuales nos empanizamos en polvo y saltamos cual si montaña rusa. Llegamos a nuestro destino, y por supuesto, media Van quería ir al baño. Y... para qué son los arbolitos si no... arbolitos: allá vooooy.

Después del necesario desagüe, nos pusieron el equipo, el cual consistía de un casco y un chaleco de agua apretadísimo, peor que corset, y nos dieron las reglas, 3 para ser exactos: 1. paciencia, 2. más paciencia y 3. mucha más paciencia...Listo, súbanse al bote y ahí va lo básico para sobrevivir, lo cual se resume así: a) Tomen el remo, b) Nunca suelten el remo porque es como el salvavidas, c) Si se caen, súbanse al bote.... como Dios les dé a entender. Vamos a practicar esto antes de llegar a los rápidos. Y bueno, para seguir la aventura le paso a Cecy el comando.

5 comentarios:

Unknown dijo...

JAJAJAJAJAAJAJAJAJAJAJAAJAJAJAJAJA amiga!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

si muchas veces me he reído con tus patoaventuras HOY me he doblado de la risa.. xq me doy cuenta que no soy la única que en las curvas va duro y dale con frena .. frena.. baja la velocidad.. FRENA FRENAAAAAAA!! ... es una experiencia que mucha gente en el norte no experimenta...pero es realmente UNICA

Ah.. y la foto del clásico bocho asesino en carretera... no podía faltar jijijiji

QUIERO SABER QUE MAS PASO EN LA HISTORIA!!! CECI CUENTA!!! CUENTA !!! :D jijiji

grg dijo...

Cualquier tour que dirija un individuo llamado el Patas, merece ser narrado.

Lo de las curvas, sin comentarios. Yo me hubiera vomitado.

Ceci, no nos dejes picados. Métele al teclado.

Akaotome dijo...

Yo me fui directo a las fotos y cuando vi el bocho dije "debió ser difícil viajar en bocho", pero cuando vi la troka inmediatamente pensé "pues qué clase de accidente tuvieron que terminaron así"... BAH! Me inventé toda la historia...

John Pluecker dijo...

orale. quiero más ya. qué no sea muy gacha la cecy y que se ponga las pilas y que nos escriba todo todito.

A. dijo...

Kena:
Amiga, las curvas sí son peligrosas, definitivamente.

Nina: El Patas se hará leyenda... jajajaja.

Akaótome: Y bueno, en realdiad las fotos en gran parte para eso son, para inventarse historia spropias.

JP: Ya vendrá la secuencia de estas aventuras en tierras huastecas... jeje.